Han pasado casi cuatro meses desde el anuncio del primer caso de COVID-19 declarado en México y lo que ha traído consigo en el ámbito empresarial es un fuerte impacto en el flujo de efectivo, caída en las ventas, adaptación y reubicación de los lugares de trabajo, despidos, incrementos en costos de materias primas y mucha incertidumbre en la continuidad de los negocios.

Ante la adversidad y la adaptación a una nueva forma de vida y de hacer negocios, las empresas deben de medir, buscar estrategias y tomar acciones para mitigar el incremento de sus pasivos para no ver afectados los resultados en sus estados financieros. Los siguientes puntos son algunos de los que deben ser considerados para mantener un buen control de pasivos:

1. Remuneración del personal.

2. Liquidaciones del personal.

3. Posibles demandas por liquidaciones no adecuadas.

4. Incremento de las renovaciones de seguros de vida y gastos médicos mayores para los empleados. Las compañías de seguros esperan incrementos en este tipo de seguros por la siniestralidad ocasionada por el COVID-19 y por el aumento en la inflación a los insumos médicos.

5. Incremento en la renovación de la póliza de transporte de mercancía el aumento de la siniestralidad en robo con violencia.

6. Incremento en la renovación de la póliza de responsabilidad civil por posibles demandas de contaminación en productos o materias primas, así como recepción de visitas a las instalaciones de la empresa.

7. Incremento en la carga social en el caso de que el IMSS declare al COVID-19 como un riesgo de trabajo.

8. Incrementos en las cláusulas del contrato colectivo de trabajo al momento de negociar renovación.

9. Incremento en el presupuesto destinado a ciber seguridad para evitar pérdidas en el trabajo a distancia.

10. Destinar presupuesto para protocolos de bioseguridad dentro de las instalaciones de la empresa, así como insumos médicos y de limpieza.

Cada uno de los puntos mencionados deberán ser evaluados desde una perspectiva de riesgo sistémico para cuantificar el impacto económico y de viabilidad para la empresa en el desarrollo de las actividades diarias y de la proyección esperada de los próximos meses.

En Sabse Actuarial estamos para apoyarte.